Fiestas.
Buena parte del origen de las fiestas canarias tiene un sustrato religioso, pero en otras sus raíces deben buscarse en las tradiciones aborígenes. Las fiestas han sufrido variaciones con el paso del tiempo y mientras unas desaparecieron; otras han surgido con nuevos bríos persiguiendo distintos fines.
Los motivos para festejar son muy variados y están originados por numerosas cuestiones relacionadas con el desarrollo social en su conjunto.
Predominan festejos donde los rituales religiosos marcan la pauta, pero en los de La Rama se apela a tradiciones que marcaron un pasado muy lejano.
Hay jolgorios que persiguen finalizar con la seguía y su secuela de hambre y miseria, mientras otros como los siempre esperados carnavales, solo tienen el objetivo de entretener a grandes masas de la población y dejan buenos dividendos económicos a la amplia gama de comerciantes vinculados a la actividad.
Las fiestas todas son expresión vida de los sentimientos populares y en Islas Canarias mantienen su frescor porque exhiben una constante evolución.